Bajo el signo de la esperanza, que no defrauda, el pasado 30 de septiembre nuestra Iglesia Diocesana se congratuló por la Solemne Concelebración Eucarística en la que por imposición de manos de nuestro Pastor Diocesano Monseñor Miguel Ángel Castro Muñoz, fueron ordenados Presbíteros los Diáconos: Álvaro Ramos Arenas y Giovanni Mendoza López.

Así también, recibieron el orden del Diaconado los Seminaristas Acólitos: Bernardo Reyes Martínez, Christian Giovanni Hinojosa Palacio, Christian Sánchez Valerianes e Israel Rojas Martínez.

Dicho rito de ordenación comenzó el lunes 29 de septiembre en la festividad patronal del Seminario Conciliar de San Rafael Arcángel, en la que los ordenandos hicieron su profesión en la capilla del mismo. Este acto fue en presencia del Excelentísimo Señor Obispo, el Equipo Formador, Sacerdotes, familiares y laicos allegados que fueron invitados. 

Tras haber jurado fidelidad a Dios y a su Iglesia, en  la Santa Iglesia Catedral Sede de nuestra Diócesis, llena de fieles de distintas parroquias y comunidades en que los candidatos a órdenes sagradas han prestado servicio, dio inicio la Santa Misa. En la que después de los ritos iniciales y la liturgia de la palabra, llegó el momento de presentar a los elegidos ante el Pueblo de Dios y al Pastor. Uno a uno se fueron presentando, primero los ordenandos al diaconado y después los candidatos al sacerdocio. Esta presentación estuvo a cargo del Pbro. Isaac Cruz Bautista, Rector del Seminario.

Acto seguido comenzó la homilía de Monseñor Miguel Ángel, en la que saludó al Vicario General, al Rector del Seminario, a la Curia Diocesana y de manera especial a Mons. Rogelio Palma Tapia como gran testimonio del sacerdocio de Jesús en nuestra Diócesis. Así como a los sacerdotes invitados de otras Diócesis y a nuestro presbiterio. 

Continuó la celebración con la promesa de los elegidos, siguiendo la letanía de los santos y la oración de consagración sacerdotal y diaconal. Al finalizar la oración prosiguió la imposición de manos del Obispo y del Presbiterio y para finalizar el rito, los nuevos diáconos y sacerdotes se revistieron con sus dalmáticas y casullas respectivamente.

Inició la Liturgia Eucarística en la que participaron del altar por primera vez los diáconos, y concelebraron por primera ocasión los neo-presbíteros. 

Para concluir la Santa Misa, los nuevos diáconos y sacerdotes impartieron la bendición a sus familias y el Neo-Presbítero Giovanni Mendoza López dirigió un mensaje de acción de gracias a la asamblea en la que agradeció a los familiares e invitó a sus compañeros ordenados a nunca dejar de orar. 

Demos gracias a Dios por este momento de alegría y esperanza para esta porción de su Pueblo Santo y seguimos unidos en oración para que nos conceda un mayor número de vocaciones a la vida sacerdotal.